Lejos del abismo de una caricia
robada en una danza nocturnavuelan las cometas del destino
dibujando los cantos del silencio
en la fragilidad de un suspiro
que desgarra todos los sentidos.
Las manos buscan moldear el tiempo
al curso de los momentos presentes
en el camino a un colorido amanecer
tras las ventanas de la ilusión
donde los imposibles descansan
esperando una nueva oportunidad.
En el océano de la soledad
mis pensamientos se fueron a navegar
buscando los luceros de tus ojos
que me indicaron aquel norte
donde los deseos se desnudan
en el febril fulgor de los cuerpos.
Un sueño olvidado despierta mi rostro
perdido en un valle eterno
donde un sol azul abraza un bosque
que recorrieron mis pies descalzos
cuando el silencio se dividió
para encontrar el canto de tus suspiros.
(FE-2017)